MEXICO SE SUBIO AL DOUBLE DECKER

Autobús Double Decker, uno de los símbolos londinenses.
(Imagen encontrada en la red. Crédito a quien corresponda)

Es imposible hablar de los formidables autobuses Double Decker sin pensar inmediatamente en Londres, capital del Reino Unido.  Estos gigantes rojos son un símbolo londinense desde hace muchísimos años. Aún antes de que aparecieran las versiones con motor ya existían sus antecesores tirados por caballos. De hecho, al hablar de la historia de los autobuses en Londres, forzosamente se tiene que hablar de los DD. No siempre fueron rojos pero por lo menos desde 1950 hasta la fecha conservan este llamativo color. Innumerables versiones de DD han aparecido en escena a través de los años, rediseñando y mejorando a las anteriores. Sin embargo habría que resaltar a algunas de ellas como las del Routemaster que estuvieron presentes por más de 50 años, hasta que en 2005 fue retirado el último de ellos. En 2011 se anuncia una nueva versión de híbridos que para este tiempo ya debe estar en operación.

DD Híbrido. Tecnología de punta para el servicio urbano.
(Imagen encontrada en la red. Crédito a quien corresponda)

En nuestras ciudades mexicanas no ha habido algo parecido, salvo algunos casos, pero del servicio foráneo. Recuerdo haber viajado en un autobús tipo DD de la línea "Estrella de Oro" de México a Acapulco en la década de los 90s. Fue una experiencia especial viajar en la parte delantera superior de ese autobús, los barrancos de la sierra guerrerense cobraban otra dimensión. "Estrella de Oro siguió teniendo en sus filas varias unidades de este tipo, pero fueron repartidas en distintos recorridos del sureste mexicano, ahora como parte del Grupo ADO, cuando estos compraron a los primeros, por allí de 2007. Igualmente, ADO tiene un servicio turístico en la Cd. de México con autobuses tipo DD.

Double Decker "Mexicano" del Grupo ADO.
(Imágen de METROFERREO)

Y regresando al tema de la ciudad de Londres,  donde recientemente finalizaron los juegos olímpicos,  fue una grata sorpresa fue ver que nuestros atletas ganaron una importante cantidad de medallas. Cosa a la que no nos tienen muy acostumbrados. Clavados  nos dio 2 de plata y una de bronce, Tiro con arco, una de plata y una de bronce, Taekwondo, un bronce y por primera vez, un deporte de conjunto como lo es el Futbol, nos dio una fabulosa medalla de oro. Todo esto fue muy emocionante, pero el momento cumbre fue ver nuestra bandera en el sitio mas alto y escoltada por las banderas brasileña y sur-coreana. Y como fondo, sonando en todo su esplendor nuestro hermoso Himno Nacional.

Una verdadera satisfacción la medalla de oro lograda en
Futbol, en Londres 2012 (Imágen de Notimex)

No falto el momento chusco, cuando el político mexicano Carlos Peña Nieto (o Enrique Salinas De Gortari, no recuerdo cual de los dos) felicitó vía Twitter a las clavadistas Paola Espinosa y Alejandra Orozco, invirtiendo por error sus apellidos.

Estos triunfos son una inyección de optimismo, pero aún estamos demasiado lejos de llegar a ser una potencia deportiva, solo nos dan una esperanza de ir creciendo en disciplinas en las que antes ni figurábamos. Sin abstraernos de la realidad y sin dejar que se nos olviden asuntos importantes en nuestro México, este tipo de éxitos, nos muestran que el mexicano tiene la capacidad de salir adelante con constancia y disciplina. Por lo pronto, especialmente en Futbol, que es el deporte mas popular en  nuestro país y en el mundo, podemos decir que México subió a lo más alto del Double Decker de Londres y ondeo su bandera.

Saludos y hasta la próxima.


NOTA:
El siguiente enlace nos lo comparte nuestro amigo GERABUS:

DELFIN DINA-CASA (TIJUANA, B.C. 1978)

Iniciando este nuevo concepto en ESQUINA-BAJAN, les presento esta unidad, la cual fotografié hace ya muchos años. En aquel entonces, mis padres me enviaron a vivir durante algún tiempo con unos familiares que residían en la Ciudad de Tijuana, B.C..  A los pocos días de haber llegado, mis tíos y primos tuvieron que hacer un viaje a Los Ángeles, por lo cual debí permanecer solo en su casa durante unos días.

Al llegar el sábado decidí ir de compras al tianguis de la colonia Los Altos. Pero, se me ocurrió la brillante idea de tomar "prestado" el FORD Mustang de mi tío. De ida circulé por la avenida principal, la única pavimentada en aquel entonces y que llegaba hasta lo alto de esa loma, partiendo literalmente por la mitad el mercado ambulante. Al llegar, tuve muchos problemas para circular, porque había demasiada gente, pero como pude tomé un lugar para "parkearme", aunque al hacerlo, noté que el pedal de freno estaba muy bajo.

Después de hacer mis compras, abordé nuevamente "mi" carro, pero el sentido común, o la impaciencia, me hizo que virara y tomara un camino diferente para el regreso. Era una calle polvorosa con una pendiente mas pronunciada que la anterior, aunque casi sin gente. Cuando empiezo a descender, intento aminorar la velocidad, pero ¡Oh sorpresa! los frenos no funcionan. El carro era automático, pero aunque hubiera sido standard, como adolescente no hubiera sabido que hacer, solamente me traté de aferrar al volante en medio de tanto brincoteo. Solo quedaba a mi paso una gran nube de polvo. Afortunadamente ningún carro o persona se atravesó en mi camino.

El Mustang solo se detuvo hasta que la calle tipo columpio, terminó de bajar y comenzó a ascender.  Quedo impresionado cuando pienso que mi regreso hubiera sido por la calle pavimentada. Mi integridad y la de muchas personas hubiera estado en juego, pero gracias al Creador que me dio el sentir de tomar otra ruta.

Pues, meses adelante y ya casi para regresar al D.F., me compre una camarita fotográfica, de esas con rollo 110 y saqué algunas fotos de lo que siempre ha sido mi pasión... los autobuses. Entre ellas la de el "Delfín" No. 41 que presento el día de hoy. Era parte de un lote como de 40 camiones nuevecitos, con su franja verde bandera y que tenían un recorrido desde unas calles antes de la línea fronteriza y circulando por la Av. Revolución, donde, esquina con la 7ma., se encuentra el famoso Jai-Alai. Luego continuaba su recorrido por el Blvd. Agua caliente y pasaba por el Hipódromo, llegando hasta Pinos. No recuerdo bien, pero parece que la línea a la que pertenecía este autobús, era "Autobuses urbanos de Tijuana, Verde y amarillo".

Me llama la atención que se anunciara en el parabrisas "BULL RING" y "RACE TRACK", palabras en idioma inglés. Por supuesto que Tijuana tradicionalmente ha sido una ciudad con mucho turismo del vecino país del norte, sin embargo, normalmente sería muy difícil que los estadounidenses abordaran un camión urbano en nuestro país. Pero por otra parte, recordemos que los "Delfines"  eran un servicio de primera clase, que en verdad contrastaba con las unidades que había antes que ellos. Probablemente, anunciar estos lugares del recorrido en inglés, era con el propósito de ofrecer este servicio a los "primos", ya que ellos son muy aficionados a espectáculos como los toros y las carreras de autos. O simplemente los tijuanenses, conocían más estos lugares por su referencia en ingles que en español. Lo cierto es que en su momento, no me interesé por investigar el motivo real.

Generalmente, las líneas de Tijuana se nutrían de autobuses desechados de ciudades estadounidenses. Pero recuerdo en especial otra línea: "Autobuses Azul y Blanco J. Magallanez" que tenían por lo menos dos "Vitrinas" FORD en muy buen estado, en una ruta que llegaban hasta Playas de Tijuana. 

Desgraciadamente, casi todas mis fotografías de autobuses de ese tiempo las he perdido con el paso de los años,  Pero por lo menos, la que presento en esta ocasión y que acabo de recuperar del archivo de un hermano mio,  me permite plasmar algunos recuerdos de aquel lejano tiempo.